Se va, un hijo de la música nacional; de la más práctica, pura y espiritual. Muere un amigo, como cuando una semilla sembrada, se abre para crecer en otras formas y ritmos ájenos a su estado primigenio. ¡ Para dar fruto ! sin egoísmo, a todos.
Admirado amigo, cuánto has labrado en tantos acordes, camino de trinos, cantos y encaramientos con el diablo, nuestra historia y esos que mataron a Juanito, esos que siguen impunes al poder de un pueblo ignorante, taciturno y embrutecido por el mal gusto. Adiós Dioni, amigo de la música, nuestra música por la paz… por la paz… siempre te admirare. ¡ GRACIAS POR NACERNOS HOY !
Estoy triste porque no comprendo tu enorme regalo. Gran músico , escazuzeño y letrado, compositor, cantautor y poeta, retajilero, historiador y correcto del neófito. Eminencia que perdura en nuestros recuerdos. En mi música y canto. Adiós amigo, hasta pronto, que tu música nos llueva como inviernos pa que maduremos como nación. Nos queda tu maravillosa letra, libros y canciones. Tanto amigo..! Gracias.! Vuela alto. ¡ Cantas allá ! Me dueles, me naces. Sale el sol…
Recordando a un amigo con quien construimos senderos de progreso y de reo de este progreso no podemos negar la paz como vía de celebración y obtención de la recompensa. La paz como temática de progreso y acción, la paz como amalgama de unión.
Nathanael M.